miércoles, 28 de enero de 2009

paciencia


El murmullo de la sala es monótono, monocorde.
El movimiento contínuo de personas que entran y salen , me marea.
Los niños chiquitos lloran, los niños más grandes gritan, corren y piden que les compren algo.
El personal atiende por inercia; no es atento, pero tampoco desatento.
Están ahí, explicando quinientas veces el mismo tema: llenar un formulario.
Desorientados consultan a los que están en la fila, y luego se colocan al fondo, casi en la otra cuadra!.
Hay expertos e inexpertos.
Tímida una mamá con su bebé en brazos, no se anima a acercarse al oficial para pedirle que le permita entrar, yo la incentivo a hacerlo y gana unos cincuenta lugares en la fila.
La señora con bastón blanco es ayudada por un joven amable; sí, los hay.
Hay personas de varias nacionalidades.
El aire se vuelve pesado, recién me puedo sentar, y tomo un poco de agua, que por suerte compré antes de entrar. Ya hacen 2 horas que llegué. Mi número : 653, están llamando al número 330!
PACIENCIA!
Es la palabra que estaba escrita en el papelito que me tocó, cuando eleimos el regalo para el Niño Jesús que le hicimos en esta Navidad.
PACIENCIA!
Hay que esperar. Van por el nº 530, falta menos.Estoy aburrida. Estoy cansada.
Y lo peor es que no se termina hoy...
faltan 40 días para tener mi PASAPORTE
y peor aún!.... no sé cuándo lo podré usar!!!!!

martes, 20 de enero de 2009

la aventura de la amistad


Mucho se ha hablado sobre la amistad.Sus características: la nobleza, la solidaridad, la comprensión, es respeto.
Si bien siempre se valora la amistad en los momentos duros o difíciles, me gustaría hablar de los buenos momentos con amigos.
"Compartir", es la palabra que me gusta. Quiere decir, repartir entre, dividir entre.
Y la vida compartida nos dá una riqueza incalculable. Cuande se comparte una tristeza o un problema con el amigo, esa tristeza se achica, se tolera.
Cuando compartimos una alegría, esa alegría se agranda.
Estar juntos en un asado, un viaje o una fiesta, son la fuente de muchas anécdotas, que seguiremos recordando con el paso del tiempo.
Compartir un día de playa, al sol, las "cargadas",los apodos "el duque" o el "marquez",los silencios cuando alguno se "cabrea". El asombro ante lo nuevo o desconocido. Las confidencias, los miedos y los sueños.Ese par que nos entiende, que nos escucha y al que escuchamos.
Tal vez más viejo o más joven, pero que al compartir, se convierte en cómplice del camino.
Si bien todo el año se comparte con amigos, las vacaciones tienen un sabor especial.
Se comparte más tiempo, y éste, libre de horarios y obligaciones,crea un clima festivo y relajado que nos llena el corazón con pequeñas cosas.
Perderse en el laberinto, lavar el auto con una manguera pinchada, paralizarse en las alturas o tener miedo a las arañas, son anécdotas que reviviremos una y otra vez al recordarlas.
Que nos harán reir, emocionarnos, divertirnos.
A mi amigo de toda la vida: Miguel, y a los que se sumaron: Negro y Betty,Pepe y Ale, Juan Carlos y Patri( por orden de edad!), gracias por ser mis amigos.

Los Santos

En el recorrido por el centro del país, ví el nombre de Hoteles, comercios, restaurantes, etc. y me pregunté en qué se habrían inspirado.
Algunos eran apellidos de sus dueños:"Rodriguez", "Quiroga hnos." etc.
Otros, nombres de fantasía, "Bristol", "Los sauces","Jet set", etc.
Pero la mayoría tenían relación con la fé.
Supongo que el inicio de un proyecto nuevo, como instalar un comercio, es un acto de fé y esperanza de que todo saldrá bien, y por eso lo encomiendan a un Santo o a la Virgen.
De San Cayetano(patrono del trabajo) a San Esteban( mártir) ; de San Antonio( el de los novios) hasta San Roque y Sta. Cecilia( de la música); San José(protector de los padres y maridos), a San Isidro, San Javier, San Justo, Sta. Rosa, San Alfonso, San Miguel, San Luis, Virgen del Carmen, Virgen de Lourdes, Virgen de Luján.
Ríos, puentes, calles y negocios, reflejan ese espíritu religioso del pueblo. Y nos revelan el conocimiento y el amor de la gente a los Santos.
Las virtudes por las que los Santos son recordados, y sus obras de bien, deben servir como ejemplo de vida, ya que solamente, fueron personas comunes, como nosotros, con virtudes y defectos, pero con tanto amor por Dios que fueron dóciles a su espíritu. Y también son intercesores de nuestros pedidos ante Dios, porque están un poquito más cerca que nosotros.
En el interior del país, donde se tiene en cuenta tanto a los Santos, la gente es cálida, atenta, servicial.
Tal vez porque imitan a sus Santos Patronos, tal vez, porque les piden su intercesión,... tal vez porque son dóciles a la palabra de Dios.
Todos los años, al azar, por casualidad( o la Providencia), recibo una estampita de un Santo, y a El me confío , es un compañero de año. En este comienzo de año te invito a buscarte un compañero.